Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla cuentan con algunos de los barrios más caros de toda Latinoamérica.
Uno de los países que llama la atención de muchos viajeros es Colombia, ya que además de sus buenos paisajes y sus lugares increíbles, para varios turistas el precio de algunas cosas es bastante económico, lo que hace una gran diferencia en comparación con otras naciones.
Pero también, cuenta con algunos de los barrios más caros en Latinoamérica en lo que respecta al precio promedio que tiene el metro cuadrado (m²) en venta entre las zonas evaluadas según el ranking presentado por Properati y Trovit, parte de la red de portales inmobiliarios de Lifull Connect, sobre los barrios más caros.
En la ciudad de Bogotá, el barrio Chicó, en la localidad de Chapinero, se ubica en el puesto número 14 en América Latina con un precio promedio de mil 611 dólares por m²; El Poblado, en Medellín, se sitúa en la casilla 16, donde el m² arroja un valor de mil 183 dólares; Pance, en Cali, ocupa la posición 19, con 987 dólares por m²; y El Prado, en Barranquilla, cierra el ranking en el puesto 20, con 604 dólares el m².
Parte del corazón financiero de Bogotá es Chicó, mientras que El Poblado con su lujo y calles empinadas destaca por ofrecer una vida nocturna vibrante y musical.
A su vez, El Prado se ubica en el casco histórico de Barranquilla, la ciudad más grande del caribe colombiano y Pance, situado al sur de Cali, es una zona principalmente residencial, donde los estratos altos encuentran la tranquilidad necesaria lejos del ruido y la cotidianidad caleña.
De acuerdo con el documento, respecto al 2021, el precio por metro cuadrado en dólares descendió 33% en el barrio Chicó, un valor similar al 29% disminuyó en Pance. En El Poblado y El Prado la caída fue visiblemente menor: 15% en cada barrio. No obstante, en el mismo periodo el precio del metro cuadrado, en pesos colombianos, aumentó en todos los barrios colombianos, menos en Pance.
La explicación de lo anterior se debe a la devaluación del peso colombiano frente al dólar. Y aunque los precios de las viviendas suben en la moneda local, no superan al 28% que se ha encarecido el dólar y por ende se cotizan más baratos en la moneda extranjera.