En la región, las mujeres consideran que comenzar un nuevo negocio es una buena opción de carrera, sin embargo, reflexionan que no es una tarea fácil de iniciar, ni visualizar nuevas oportunidades comerciales, y confían menos en sus habilidades para emprender y se sienten inseguras sobre sus conocimientos, de acuerdo con el último informe de Monitor Global de Emprendimiento (GEM, por sus siglas en inglés).
El informe detalla que, Brasil es el país donde las mujeres estuvieron más cerca de la paridad en cuanto a iniciar un nuevo negocio (41,3% frente a 42,7% de hombres). Mientras la mayor diferencia de género se da en Panamá, donde las mujeres tienen un 14 por ciento menos de probabilidades de comenzar un emprendimiento sobre los hombres.
“La brecha de género con respecto a visualizar una nueva oportunidad de negocio fue modesta en la mayoría de los países de esta región. En Guatemala las tasas de reconocimiento a oportunidades de las mujeres son un 4% menos que la de los hombres”, describe el estudio.
Una región emprendedora
Los hallazgos del GEM han demostrado que la región latinoamericana y del Caribe es altamente emprendedora: “Las mujeres de esta región tenían intenciones muy altas, con dos de cada cinco esperando iniciar un negocio en los próximos 12 meses, en comparación con casi la mitad de los hombres”.
Para la experta en marketing y posicionamiento de marca en Latinoamérica, Catalina Irurita, es importante seguir fomentando el emprendimiento en las mujeres para que puedan tener independencia financiera y tener la capacidad de adquirir recursos financieros.
“La independencia económica es una de las situaciones que nos empuja como mujeres a buscar emprendimientos. Nosotras pensamos diferente, estamos preparadas para hacer cosas distintas y eso es lo que nos caracteriza en Latinoamérica”, añade Irurita.
La mayor parte de la actividad para las mujeres en la región ocurre en los sectores de Gobierno, Salud, Educación y Servicios Sociales son un 80 por ciento más probabilidades de insertarse en ese mercado que los hombres, mientras que un 33% se enfoca en el sector mayorista y minorista.
Aspectos que resaltan de las mujeres emprendedoras latinoamericanas
En América Latina y el Caribe, casi dos tercios de las mujeres conocen personalmente al menos a otro empresario, siendo esta la tasa más alta para mujeres en todas las regiones del mundo: “Las conexiones personales con otros empresarios brindan recursos importantes para aquellos que inician y hacen crecer negocios, además de ayudar a desmitificar el proceso de puesta en marcha”.
La mayor diferencia de género se encontró en Uruguay, donde las mujeres tienen un 11% menos de probabilidades de informar que conocen a otro emprendedor, mientras que cuatro de cada cinco mujeres en República Dominicana afirmaban conocer a otra persona que dirige un negocio emergente.
Otro aspecto que destaca el GEM sobre las mujeres en la región es que, las inversionistas son más activas a comparación de cualquier otra región del mundo, la tasa de inversión empresarial en los últimos 12 meses anteriores fue del 13,6%.
“La región de América Latina y el Caribe también cuenta con percepciones sociales favorables sobre el emprendimiento como una buena opción de carrera, reconocimiento de oportunidades y habilidades, que contribuyen a tasas más altas de intenciones y actividad de emprendimiento”, concluye el GEM.