El Gobierno de Nayib Bukele ha intensificado su persecución contra los periodistas en El Salvador.
En una reciente declaración, el director de la policía salvadoreña, Mauricio Arriaza Chicas, anunció que se tomarán acciones judiciales contra los reporteros que denunciaron e investigaron las negociaciones secretas entre el Gobierno del expresidente Mauricio Funes y las maras, las pandillas que sembraron el terror en el país.
Estas negociaciones, conocidas como la “tregua”, se llevaron a cabo en 2012 y permitieron reducir los niveles de violencia en ese momento en El Salvador.
Arriaza advirtió que aquellos líderes políticos y algunos periodistas que estuvieron involucrados en la tregua serán llevados ante la justicia. Según sus palabras, deberán rendir cuentas por su complicidad en la comisión de delitos y por haber contribuido a que las circunstancias agravantes afecten al pueblo salvadoreño.
A finales de mayo, la justicia salvadoreña condenó al expresidente Funes a 14 años de prisión por haber negociado la tregua con las pandillas durante su mandato (2009-2014). Funes ha buscado refugio en Nicaragua desde 2016, donde cuenta con la protección del presidente Daniel Ortega, quien le ha otorgado la nacionalidad nicaragüense.
Junto a Funes, también ha sido condenado a 18 años de prisión David Munguía Payés, exministro de Justicia y Seguridad. La fiscalía acusó a ambos exfuncionarios de permitir el fortalecimiento económico y territorial de las pandillas a cambio de reducir los índices de homicidios entre 2011 y 2013, con el objetivo de beneficiar al Gobierno en turno y favorecerlo en las elecciones.
El destape de estas negociaciones entre el Gobierno y las pandillas generó un escándalo político en El Salvador, un país sumido en una brutal violencia. Las filtraciones pusieron en aprietos al Ejecutivo de Funes, especialmente en un momento en que también se conocían casos de corrupción que involucraban al presidente.
El medio digital El Faro fue uno de los primeros en denunciar estas negociaciones, convirtiéndose en objeto de críticas por parte del Gobierno.
El periodista Óscar Martínez, jefe de redacción de El Faro, expresó su indignación en Twitter: “El director de la policía anuncia que irán tras periodistas que cubrieron la tregua. Este país no habría conocido la tregua sin el periodismo, ni tampoco los múltiples pactos posteriores, incluyendo el del Gobierno de Bukele. ¡Esto es escandaloso!”.
En un programa de televisión, Arriaza aseguró este martes que la justicia salvadoreña tomará medidas contra políticos y reporteros que dieron cobertura a estas negociaciones. Aunque no mencionó nombres de periodistas, advirtió que están bajo la lupa. Esta nueva embestida del régimen de Bukele contra la prensa independiente de El Salvador se suma a una serie de ataques anteriores.
El mandatario ha dirigido sus críticas hacia medios como El Faro, que han revelado negociaciones entre el Gobierno actual y las pandillas. Debido a la persecución, la redacción de El Faro decidió trasladar su operación administrativa a Costa Rica, aunque su redacción principal seguirá en San Salvador. “Seguiremos haciendo periodismo en El Salvador, pero nuestra operación administrativa y legal ya no.
Ahora somos un periódico centroamericano con sede en San José. Es el resultado de un proceso que iniciamos hace unos meses debido a la falta de condiciones para seguir operando en El Salvador”, informó El Faro a mediados de abril.
El anuncio de Arriaza llega en un momento en que Bukele ha lanzado una dura guerra contra las maras, lo que ha llevado a la detención de hasta 68,000 personas hasta la fecha. Desde hace un año, el mandatario ha impuesto un régimen de excepción que ha sido duramente criticado por organizaciones de derechos humanos, que aseguran que se han violado los derechos fundamentales de los detenidos.
Más historias
Brasil suspende la red social X por desacato judicial
Crisis de combustible en Colombia: Suspenden venta de boletos en distintos aeropuertos
Milei veta aumento a jubilaciones tras derrota en Congreso